Los capitalistas de riesgo están invirtiendo grandes sumas de dinero en startups de inteligencia artificial, especialmente aquellas dirigidas por figuras destacadas de la tecnología. SandboxAQ, una empresa derivada de Alphabet, la empresa matriz de Google, está buscando recaudar más fondos, a pesar de haber conseguido ya 500 millones de dólares a principios de 2023. Según fuentes de Bloomberg, la startup busca una nueva ronda de financiación que la valoraría en 5 mil millones de dólares.
En su última ronda de 500 millones, completada en febrero de 2023, tuvo el apoyo de inversores como Breyer Capital, fondos de T. Rowe Price y Marc Benioff. Pitchbook estimó que su valoración después de esa ronda era de 4 mil millones de dólares. SandboxAQ comenzó como la unidad de computación cuántica de inteligencia artificial de Alphabet, liderada por Jack Hidary, quien también es miembro del consejo de X Prize. En marzo de 2022, se convirtió en una startup independiente con Hidary como CEO y Eric Schmidt, ex CEO de Google, como presidente.
La misión de SandboxAQ es trabajar en la intersección de la computación cuántica y la inteligencia artificial, aunque no está construyendo una computadora cuántica. Según Hidary, la empresa desarrolla software basado en física cuántica para modelar moléculas y predecir su comportamiento. Google sigue trabajando en la parte de computación cuántica, pero SandboxAQ ya tiene varias asociaciones en este campo.
La startup está involucrada en una variedad de productos en ciencias de la vida, ciencia de materiales, navegación, cifrado y ciberseguridad. No se enfoca en la inteligencia artificial del tipo chatbots como ChatGPT, sino que utiliza técnicas de modelado en ecuaciones. Hidary explicó que “hemos entrado en el mundo de los grandes modelos cuantitativos, LQMs, que comienzan con ecuaciones para generar datos. Esa es la forma más eficiente y precisa de generar datos”.
SandboxAQ ya tiene contratos de desarrollo impresionantes, como trabajar con la empresa Novonix para extender la vida útil de las baterías de iones de litio, un contrato con la Fuerza Aérea de EE. UU. para desarrollar sistemas de navegación magnética que no dependan del GPS, y colaborar con varios hospitales de EE. UU. en un sistema de “magnetocardiografía” impulsado por inteligencia artificial, un nuevo tipo de dispositivo médico para la imagenología de enfermedades cardíacas.
En resumen, SandboxAQ está apuntando a metas más ambiciosas que simplemente escribir trabajos académicos o crear videos falsos. Hay indicios de que podría convertirse en una de las empresas de inteligencia artificial que los capitalistas de riesgo están ansiosos por respaldar. A lo largo del año, varios inversores han creado vehículos de propósito especial (SPVs) para adquirir acciones de la empresa, ya que muchos están interesados en participar en startups de IA de renombre. SandboxAQ no respondió de inmediato a nuestra solicitud de comentarios.