Geoffrey Hinton, conocido como el “Padrino de la IA”, ha ganado un Premio Nobel de Física por su trabajo en el entrenamiento de redes neuronales artificiales utilizando principios de la física. Este destacado científico, que ha expresado su preocupación sobre los posibles peligros de la inteligencia artificial para la humanidad, ha sido reconocido con este prestigioso galardón por su contribución fundamental al campo de la IA.
La Academia Real Sueca de Ciencias, que otorga el Premio Nobel, destacó que “Geoffrey Hinton inventó un método que puede encontrar propiedades en los datos de manera autónoma, lo que permite realizar tareas como identificar elementos específicos en imágenes”. Hinton comparte este premio con John J. Hopfield, de la Universidad de Princeton. Su trabajo conjunto ha sido clave para los avances en el Aprendizaje Automático y en el desarrollo de redes neuronales artificiales, que son esenciales para la IA moderna.
Hinton, quien actualmente enseña Ciencias de la Computación en la Universidad de Toronto, tiene una larga trayectoria en IA que comenzó con sus primeros descubrimientos y lo llevó a Google DeepMind. Allí, él y su equipo contribuyeron a la creación de chatbots como ChatGPT de OpenAI y Google Gemini. Sin embargo, al dejar Google en 2023, Hinton expresó su preocupación de que la empresa ya no era “un buen guardián” de la IA.
Sus advertencias incluyen el riesgo de que las empresas avancen demasiado rápido y actúen de manera imprudente, así como el potencial de la IA para inundar el mercado con contenido falso y afectar el empleo. Un año después, algunas de estas preocupaciones parecen hacerse realidad, ya que las empresas utilizan cada vez más la IA para tareas de escritura básicas y el contenido generado por IA inunda nuestras redes sociales.
A pesar de sus preocupaciones, es justo reconocer a Hinton por su trabajo pionero. La IA tal como la conocemos probablemente no existiría sin él y Hopfield. Su enfoque de aplicar la física al reconocimiento de patrones fue una solución innovadora que ayudó a que las computadoras funcionaran de manera más similar al cerebro humano. El concepto de redes neuronales, una de las herramientas más poderosas de la IA, no existiría sin Hinton.
Además, Hinton nos ha hecho conscientes de que la IA es una espada de doble filo. Es una herramienta poderosa que ya está cambiando nuestras vidas y que necesita regulaciones para proteger a la humanidad de sus posibles excesos. Aunque Hinton puede no haber comprendido completamente las implicaciones de sus ideas en los años 70, hoy es un faro de luz y razón en un mundo de IA confuso y en rápida evolución.