Nueva investigación revela que tres cuartas partes (76%) de los líderes empresariales y gubernamentales creen que la inteligencia artificial (IA) jugará un papel clave en el avance hacia sus objetivos de sostenibilidad. Un estudio realizado por HP, que encuestó a más de 1,000 líderes empresariales de 10 países, encontró que la misma proporción de líderes ve la tecnología como crucial para incluir a poblaciones tradicionalmente excluidas en la economía.
Más de cuatro de cada cinco líderes también planean usar la IA para aumentar el acceso a la educación digital (90%), el desarrollo de la fuerza laboral (89%) y la diversidad en el lugar de trabajo (86%), subrayando los beneficios transformadores más amplios de la tecnología.
La IA podría tener beneficios sociales y económicos. Nancy Powell, Líder de Sostenibilidad de HP en el Reino Unido e Irlanda, enfatizó la importancia de proporcionar herramientas y habilidades digitales a las comunidades desatendidas: “Todos merecen la oportunidad de acceder a herramientas y habilidades que les permitan prosperar en la economía digital”.
A pesar del potencial de la inteligencia artificial para impactar el progreso de las empresas hacia sus objetivos ESG (ambientales, sociales y de gobernanza), HP señaló que la falta de preparación de los trabajadores y la escasez global de habilidades podrían obstaculizar el progreso esperado de las empresas.
HP no es la única entidad que reconoce el potencial transformador de la IA. La Secretaria de Energía de EE. UU., Jennifer Granholm, declaró recientemente que la IA podría ayudar a desbloquear conocimientos más poderosos para mejorar la eficiencia tecnológica.
Los centros de datos que ejecutan servidores de IA han enfrentado críticas en los últimos meses debido a su consumo intensivo de energía y el uso de otros recursos naturales, como el agua. Aunque las grandes empresas tecnológicas se han comprometido a expandir la generación de energía verde con parques solares y eólicos, se necesitan más esfuerzos.
La capacidad de la inteligencia artificial para ayudar a avanzar en objetivos clave es innegable, pero la reciente revelación de que la IA podría usarse para abordar algunos de sus propios inconvenientes ofrece un emocionante rayo de esperanza.