Regiones como Estados Unidos y Europa están trabajando arduamente para recuperar su fuerza industrial, después de años cerrando fábricas y trasladando trabajos a países como China. En este contexto, una startup polaca llamada Nomagic, que fabrica brazos robóticos para operaciones logísticas, ha anunciado una financiación de 44 millones de dólares. Este dinero se destinará al desarrollo tecnológico y comercial, incluyendo sus primeros esfuerzos para vender robots en América del Norte, fuera de Europa.
Esta inversión es significativa no solo por su tamaño, que es la más grande que ha recibido Nomagic hasta ahora, sino también por el respaldo que tiene y el panorama industrial más amplio. La pregunta clave que se plantea sobre cómo hacer que las regiones sean más competitivas en la industria es sencilla: ¿cómo? Gran parte de la fuerza laboral que solía trabajar en fábricas y almacenes ha cambiado a otros empleos. Cuando no ha sido así, los operadores industriales han reducido el número de trabajadores humanos para ahorrar costos y mejorar la eficiencia mediante la automatización.
A veces, la tensión entre los trabajadores humanos y la innovación tecnológica ha llevado a situaciones problemáticas, como el caso de una startup que ha creado un observador de trabajo basado en inteligencia artificial para detectar cuando los empleados no están trabajando, lo que algunos han llamado un “taller de explotación como servicio”. Aunque esto genera indignación, no significa que estas tecnologías no se estén desarrollando o que los humanos no se vuelvan obsoletos en ciertas funciones.
La financiación de Nomagic parece ser una señal de cómo algunos ven el futuro. Esta ronda de financiación es liderada por el brazo de capital de riesgo del Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo (BERD), una entidad que co-propietaria de más de 70 países y dos instituciones de la Unión Europea. La participación del BERD resalta el impulso que los gobiernos están dando para fomentar negocios privados y reconstruir la industria, viendo la robótica y la tecnología como herramientas clave para hacer a Europa más competitiva.
Nomagic ha recaudado alrededor de 30 millones de dólares anteriormente, y aunque no se ha revelado una valoración exacta, se ha confirmado que esta es una “ronda en aumento”. A diferencia de muchas startups de robótica, los brazos robóticos de Nomagic no son innovaciones en hardware, sino que utilizan hardware estándar. La empresa se enfoca en el software, utilizando visión por computadora y aprendizaje automático para crear una “biblioteca” de objetos y cómo manipularlos.
Los robots de Nomagic son impulsados por inteligencia artificial y pueden ser reconfigurados fácilmente para diferentes tareas. La empresa ha experimentado un crecimiento del 220% en sus ingresos recurrentes anuales en el último año y espera un crecimiento adicional del 200% este año, gracias a la demanda de clientes en sectores como el comercio electrónico y la farmacéutica.
Entre sus clientes se encuentran empresas como Apo.com, Arvato y Asos. Su competidor más cercano, Covariant, tuvo un acuerdo interesante con Amazon el año pasado, que invierte fuertemente en robótica para sus almacenes. Aunque Covariant no fue adquirida, su valoración en 2022 fue de aproximadamente 625 millones de dólares, lo que puede dar una idea del potencial de valoración de Nomagic.
Empresas como Nomagic y Covariant están desarrollando su tecnología en un momento en que la robótica está ganando terreno en entornos industriales. Grandes jugadores como Nvidia y SoftBank han identificado oportunidades en este mercado, impulsados por la necesidad de actualizar equipos antiguos y la creación de nuevos espacios físicos para manufactura y logística. El papel del gobierno también es crucial, ya que regiones como el Reino Unido, la Unión Europea y Estados Unidos están llamando a aumentar la inversión en la industria.