La Cumbre de Acción sobre Inteligencia Artificial en París estaba destinada a culminar con una declaración conjunta sobre inteligencia artificial firmada por numerosos líderes mundiales. Sin embargo, esta declaración no es tan ambiciosa como las de Bletchley y Seúl, y tanto Estados Unidos como el Reino Unido se han negado a firmarla. Esto demuestra una vez más que es difícil alcanzar un consenso sobre la inteligencia artificial y otros temas en el actual contexto geopolítico complicado.
El vicepresidente de Estados Unidos, JD Vance, expresó en su discurso de clausura que “sentimos muy fuerte que la IA debe permanecer libre de sesgos ideológicos y que la IA estadounidense no será utilizada como una herramienta para la censura autoritaria”. Vance también afirmó que “Estados Unidos es el líder en IA y nuestra administración planea mantenerlo así”.
En total, 61 países, incluyendo China, India, Japón, Australia y Canadá, han firmado la declaración, que se centra en “asegurar que la IA sea abierta, inclusiva, transparente, ética, segura y confiable”. También se hace un llamado a una mayor colaboración en la gobernanza de la IA, fomentando un “diálogo global”. Las reacciones iniciales han expresado decepción por la falta de ambición. Dario Amodei de Anthropic comentó que “en la próxima cumbre internacional, no deberíamos repetir esta oportunidad perdida”.
La regulación más ligera de la IA ha sido un tema común en el evento. La presidenta de la UE, Ursula von der Leyen, recordó a los dignatarios que la regulación de seguridad de la IA de la UE también está diseñada para simplificar las interacciones entre los Estados miembros. “Este es el propósito de la Ley de IA: proporcionar un conjunto único de reglas seguras en toda la Unión Europea — 450 millones de personas”, enfatizó von der Leyen.
El lunes, el presidente francés Emmanuel Macron instó a Europa a simplificar sus regulaciones para volver a la carrera de la IA. “Es muy claro que tenemos que sincronizarnos con el resto del mundo en términos de transmisión, permisos y ensayos clínicos”, dijo Macron. Los líderes gubernamentales deben “evitar el dilema de riesgo-oportunidad” y “la necesidad inmediata de regulación, que podría bloquear la innovación”, agregó en otro discurso el martes.
Al mismo tiempo, el presidente francés defendió la necesidad de una gobernanza internacional sobre la inteligencia artificial. “Necesitamos estas reglas para que la inteligencia artificial avance”, argumentó. “No se trata de desafiar, sino de permitir que la innovación ocurra a nivel internacional mientras evitamos la fragmentación”.
Para Estados Unidos, no firmar la declaración de la Cumbre de Acción sobre IA es una cuestión de principio diplomático. Durante los primeros días de la segunda presidencia de Donald Trump, Estados Unidos se retiró de varios organismos internacionales, incluyendo la Organización Mundial de la Salud y el Acuerdo de París sobre el clima. Ahora, el consenso de la Cumbre de IA se suma a esa lista.