En 2023, el Reino Unido destacó la importancia de considerar los riesgos de la inteligencia artificial (IA), asumiendo un papel principal en la conversación sobre la seguridad de esta tecnología. Sin embargo, hoy el gobierno ha cambiado de enfoque y ha presentado un plan ambicioso para invertir en IA, con el objetivo de impulsar lo que denomina una “década de renovación nacional”.
El “Plan para el Cambio” incluye compromisos para invertir en IA y mejorar los servicios del sector público. También se establecerán “Zonas de Crecimiento de IA” para facilitar la construcción de infraestructuras como centros de datos y áreas de investigación y desarrollo. Además, se ha anunciado que empresas tecnológicas privadas han prometido inversiones por 14 mil millones de libras (17 mil millones de dólares) y la creación de 13,250 empleos para alcanzar estos objetivos.
Entre los detalles ya revelados, se destaca que Culham, en Oxfordshire, será la primera “Zona de Crecimiento de IA”. También se planea aumentar la capacidad de computación pública en veinte veces y desarrollar una nueva supercomputadora. Se creará una nueva Biblioteca Nacional de Datos para almacenar y utilizar datos públicos en el desarrollo de IA, así como un nuevo Consejo de Energía que abordará las demandas energéticas de esta tecnología.
El gobierno basa su plan en 50 recomendaciones presentadas anteriormente por Matt Clifford, un capitalista de riesgo que ha asesorado a las administraciones actuales y pasadas. Hoy, el gobierno también aprovechó la oportunidad para señalar que el gobierno saliente nunca se comprometió formalmente a seguir estas recomendaciones, mientras que ahora está “apoyando la IA al máximo”.
Es notable que en el anuncio no se mencionan palabras como “seguridad”, “daño”, “existencial” o “amenaza”, términos que anteriormente se asociaban con la percepción escéptica del Reino Unido hacia la IA. Aunque estas preocupaciones siguen existiendo, parece que no son una prioridad para el gobierno mientras busca beneficiarse de la IA.
El Primer Ministro Keir Starmer afirmó que “la Inteligencia Artificial impulsará un cambio increíble en nuestro país” y enfatizó la necesidad de un gobierno que apoye a la industria de la IA. También mencionó que el Reino Unido no puede quedarse atrás en la competencia global y que su plan hará del país un líder mundial en este ámbito.
Curiosamente, empresas estadounidenses como Anthropic y Cohere ya han establecido operaciones en el Reino Unido y han comprometido su apoyo a los planes del país. Este desarrollo llega en un momento clave tanto para la tecnología como para la política en el Reino Unido.
A pesar de que el país ha sido históricamente el mayor mercado de inversión tecnológica en Europa, aún está rezagado en comparación con Estados Unidos. Aunque han surgido empresas innovadoras en el Reino Unido, como DeepMind y ARM, el país aún no ha producido una megaempresa comparable a Microsoft o Google. Se cree que un mayor enfoque en el desarrollo de grandes empresas tecnológicas en el Reino Unido no solo modernizará la economía, sino que también aumentará la soberanía del país a largo plazo.
En el ámbito político, el Reino Unido se encuentra en una encrucijada. Starmer, quien asumió como Primer Ministro el año pasado, tiene un historial complicado con el presidente estadounidense Donald Trump, lo que genera incertidumbre sobre cómo se desarrollarán las relaciones en los próximos años. Además, Starmer ha estado envuelto en una tensa disputa verbal con Elon Musk, un aliado cercano de Trump, quien ha criticado al Primer Ministro por su respuesta a ciertos problemas sociales.
La comunidad de inversores parece recibir con agrado el anuncio, aunque con cierta cautela. Simon Murdoch, socio gerente de Episode 1 Ventures, comentó que aunque apoyan la iniciativa, será un proceso largo que requerirá ajustes regulares para asegurar su adopción. Otro inversor, Andrew J Scott, enfatizó la necesidad de una mayor cohesión en el gobierno para que el plan tenga éxito, advirtiendo que si las políticas no están alineadas, el Reino Unido podría perder su competitividad en el sector de la IA.