Perplexity, un motor de búsqueda impulsado por inteligencia artificial, está incursionando en el comercio electrónico. El lunes, la empresa lanzó una nueva función de compras para sus clientes de pago en EE. UU. que ofrece recomendaciones de productos dentro de los resultados de búsqueda de Perplexity. Además, permite realizar pedidos sin necesidad de visitar el sitio web del minorista.
Con esta iniciativa, Perplexity busca competir con gigantes como Google y Amazon, intentando captar una parte del mercado de búsquedas relacionadas con compras. Para las consultas de búsqueda sobre productos, la herramienta muestra a los usuarios tarjetas visuales que incluyen detalles del producto, precios, información del vendedor, una breve descripción y los pros y contras del artículo. Los usuarios pueden hacer clic en la tarjeta para obtener más información, incluidas reseñas y características clave.
Los consumidores también pueden guardar su dirección y detalles de tarjeta de crédito en Perplexity para facilitar el proceso de compra. La empresa asegura que calcula los impuestos según la dirección del usuario, permitiendo comprar un artículo con un solo clic. Además, los suscriptores Pro disfrutarán de envío gratuito para los artículos adquiridos a través de este sistema de compra rápida.
Por el momento, las recomendaciones del motor de búsqueda son “imparciales”, ya que no hay espacios patrocinados, según Perplexity. Esta nueva experiencia de búsqueda se potencia mediante integraciones con sitios de vendedores, incluyendo aquellos en Shopify, lo que permite acceder a información sobre todos los vendedores que utilizan Shopify y envían productos en EE. UU. También se puede buscar añadiendo una foto del artículo deseado junto con la consulta, similar a lo que ofrece Google.
Junto con el lanzamiento de estas herramientas de compra, Perplexity está introduciendo un programa para comerciantes. Si los comerciantes se inscriben en este programa, tendrán más posibilidades de ser recomendados, ya que la empresa contará con información más completa en su índice. Los usuarios también podrán utilizar la compra rápida para adquirir productos de los socios comerciales de la empresa. Además, los comerciantes tendrán acceso gratuito a una API para potenciar la búsqueda en sus propios sitios web, lo que podría ayudar a Perplexity a ganar cuota de mercado en este ámbito.
La empresa aclaró que actualmente no toma comisiones de las compras de los usuarios y que la función de compras es independiente de su producto publicitario, que se presentó la semana pasada. Además de las grandes empresas tecnológicas, startups como Daydream, Deft y Remark también han recaudado millones de dólares de capitalistas de riesgo para desarrollar búsquedas de compras impulsadas por inteligencia artificial.
Amazon presentó su asistente impulsado por IA, Rufus, a principios de este año en EE. UU. y se expandió a otros países a finales del mes pasado. Después de su evento de ventas Prime Day en julio, la compañía destacó que Rufus ayudó a “millones” de clientes a encontrar los artículos adecuados. Google también mejoró su pestaña de compras con IA en octubre para ofrecer mejores resultados de búsqueda.
Con la llegada de modelos de lenguaje avanzados, las empresas del sector del comercio electrónico han reconocido la oportunidad de sugerir mejores opciones, ya que estos modelos pueden analizar las consultas de los usuarios y emparejar artículos del catálogo utilizando datos organizados y no organizados. La promesa de esta nueva ola de búsqueda es que la búsqueda en comercio electrónico ha sido deficiente durante años, pero ahora puedes escribir oraciones largas para describir un artículo que necesitas, y la IA hará el trabajo por ti. Estas empresas también apuestan a que la IA te ayudará a encontrar un artículo rápidamente, evitando que pases mucho tiempo buscando.
Sin embargo, esta premisa viene con una advertencia implícita: debes confiar en los resultados de búsqueda limitados que las herramientas de IA te ofrecen. Para generar confianza, las empresas que proporcionan estas herramientas deberán asegurarse de eliminar sesgos implícitos y tratamientos preferenciales antes de que los reguladores intervengan.