Amazon, Meta y Microsoft están apostando fuerte por la energía nuclear para asegurar el suministro eléctrico de sus centros de datos, ya que el uso de energía ha aumentado debido a la inteligencia artificial y la computación en la nube. Sin embargo, la semana pasada, Amazon y Meta se encontraron con obstáculos que complican sus planes. Recientes decisiones de los reguladores han frustrado sus esperanzas de encontrar soluciones rápidas para sus necesidades eléctricas.
Por ahora, los planes de Microsoft para reactivar un reactor en Three Mile Island continúan avanzando. Sorprendentemente, los problemas no están relacionados con la energía nuclear en sí, sino con los desafíos de construir grandes centros de datos sin asegurar primero nuevas fuentes de electricidad.
Meta, por ejemplo, planea construir un centro de datos de inteligencia artificial junto a una planta de energía nuclear en funcionamiento. Sin embargo, a medida que avanzaba el proyecto, comenzaron a surgir obstáculos regulatorios. El CEO Mark Zuckerberg mencionó en una reunión que uno de los problemas era la presencia de una especie de abeja rara en el terreno, según un informe del Financial Times. Muchas poblaciones de abejas están en peligro debido a décadas de exposición a nuevos pesticidas y otros factores estresantes.
Los planes de Amazon también han encontrado dificultades. La compañía quiere construir un nuevo centro de datos de gran escala junto a la planta nuclear cerca de Susquehanna, Pennsylvania, y utilizar una parte significativa de la electricidad de la planta. La Comisión Federal de Regulación de Energía (FERC), que supervisa las redes eléctricas y de gas natural en EE. UU., votó el 1 de noviembre en contra de la expansión de un acuerdo de energía existente que habría permitido a Amazon conectarse directamente a la planta. La preocupación en este caso era que otros clientes podrían experimentar menor confiabilidad, como cortes de luz, y mayores costos, ya que el centro de datos desvíaría una parte importante de la electricidad de la planta hacia el resto de la red eléctrica de la región.
Es probable que esta no sea la última vez que la FERC se involucre en la cuestión del suministro eléctrico para los centros de datos de gran escala, ya que tiene al menos otras ocho solicitudes de co-localización grandes por revisar.