La Unión Europea ha puesto un obstáculo en el camino de Nvidia, la empresa de chips, en su intento de adquirir la startup israelí Run:ai, que se especializa en la gestión de cargas de trabajo de inteligencia artificial. Este acuerdo, anunciado en abril con un costo de 700 millones de dólares, será revisado por la UE tras una solicitud de los reguladores de competencia en Italia, bajo la regulación de fusiones de la UE (EUMR). Aunque la transacción no cumple con los umbrales de notificación estándar de la EUMR, la ley europea permite que un regulador nacional notifique una transacción a la Comisión si considera que representa riesgos serios para la competencia local y puede afectar el comercio dentro del Mercado Único de la UE.
Italia presentó una solicitud de referencia a la Comisión de acuerdo con el Artículo 22(1) de la EUMR. Esta disposición permite a los Estados miembros solicitar a la Comisión que examine una fusión que no tiene dimensión europea, pero que afecta el comercio dentro del Mercado Único y amenaza con afectar significativamente la competencia en el territorio del Estado miembro que hace la solicitud. La aceptación de la referencia por parte de la UE significa que está de acuerdo en que la transacción propuesta cumple con los criterios para ser revisada bajo el Artículo 22.
La Comisión concluyó que la transacción podría afectar significativamente la competencia en los mercados donde operan Nvidia y Run:ai, que probablemente abarcan al menos el Espacio Económico Europeo, incluyendo a Italia. La Comisión también determinó que está en la mejor posición para examinar la transacción, dada su experiencia en mercados relacionados.
Ahora, la Comisión ha solicitado a Nvidia que notifique la transacción, un paso formal que implica que la empresa debe preparar documentación para informar a los reguladores de competencia de la UE sobre los detalles de la fusión propuesta, para que puedan evaluar sus impactos. Nvidia no puede llevar a cabo la transacción antes de notificar y obtener la aprobación de la Comisión. Esto podría añadir algunas semanas al tiempo necesario para completar el acuerdo. Sin embargo, si la revisión preliminar de la UE identifica problemas específicos, la UE podría iniciar una investigación más profunda, lo que podría causar meses de retraso e incertidumbre.
Aunque las grandes empresas tecnológicas disfrutaron de años de supervisión mínima en sus adquisiciones de startups y competidores más pequeños, ha habido un cambio de enfoque en los últimos años, ya que los reguladores han reconocido el legado anticompetitivo de no actuar mientras unos pocos gigantes de las plataformas acumulaban poder en el mercado. En el ámbito de la inteligencia artificial, donde la innovación depende del acceso a un número limitado de insumos clave, como las unidades de procesamiento gráfico (GPUs) que Nvidia utiliza para entrenar modelos de IA, la preocupación por la concentración del mercado ha llevado a una vigilancia más rápida por parte de los reguladores antimonopolio.
Aún no se han tomado medidas más contundentes, por lo que será interesante ver qué concluye la revisión de la Comisión. Nvidia ha sido contactada para hacer comentarios.