La inteligencia artificial generativa consume grandes cantidades de energía debido a la potencia computacional necesaria para entrenar modelos y procesar tareas. Esto ha generado preocupaciones sobre su impacto ambiental, como el aumento de emisiones de carbono y el agotamiento de recursos. Sasha Luccioni, una destacada científica de la computación e investigadora de IA en Canadá, abordó este tema en la conferencia de inteligencia artificial ALL IN en Montreal.
Luccioni expresó su descontento al señalar que la IA generativa se utiliza para buscar en Internet, lo que conlleva altos costos energéticos para tareas que los motores de búsqueda tradicionales pueden realizar. A diferencia de los motores de búsqueda básicos que recuperan información existente, los modelos de IA generan contenido nuevo, lo que requiere un gran poder de cómputo para entrenar con miles de millones de puntos de datos y responder a las solicitudes de los usuarios. Por ejemplo, la función de resumen de IA de Google ofrece instantáneas generadas por IA que resumen puntos clave de múltiples fuentes en respuesta a consultas complejas.
Luccioni advirtió que estamos acelerando la crisis climática y pidió más transparencia a las empresas tecnológicas, así como una legislación más efectiva por parte de los gobiernos una vez que se logre dicha transparencia. Reconocida por la revista Time en 2024 como una de las 100 personas más influyentes en IA, Luccioni ayudó a crear una herramienta llamada “CodeCarbon” en 2020, que permite a los desarrolladores medir la huella de carbono de su código. Esta herramienta ha sido descargada más de un millón de veces. Actualmente, trabaja en un sistema de certificación para etiquetar modelos de IA según su eficiencia energética. Comparando este sistema con las calificaciones de consumo energético de la Agencia de Protección Ambiental de EE. UU. para electrodomésticos, explicó: “Para una tarea específica, podemos medir la eficiencia energética y decir que este modelo tiene una A+, y ese modelo tiene una D”.
Aunque algunos pueden verla como anti-IA, Luccioni enfatiza que su objetivo es promover una “sobriedad energética” al alentar a los usuarios a hacer un uso reflexivo y eficiente de las tecnologías de IA.