¿Estás confundido acerca de la inteligencia general artificial, o AGI? Es el objetivo que OpenAI busca crear para “beneficiar a toda la humanidad”. Recientemente, OpenAI recaudó 6.6 mil millones de dólares para acercarse a este objetivo. Si aún no sabes qué es AGI, no estás solo. En una charla en la cumbre de liderazgo de IA responsable de Credo AI, Fei-Fei Li, una investigadora reconocida como la “madrina de la IA”, admitió que tampoco sabe qué es AGI.
Li habló sobre su papel en el desarrollo de la IA moderna y cómo la sociedad debe protegerse de modelos avanzados de IA. También mencionó su nueva startup, World Labs, que busca cambiar el panorama de la IA. Cuando se le preguntó sobre la “singularidad de la IA”, Li se mostró igualmente confundida. Dijo: “Vengo de la IA académica y no sé realmente qué significan todas estas palabras. La verdad es que no paso mucho tiempo pensando en estos términos porque hay cosas más importantes que hacer”.
Si alguien debería saber qué es AGI, probablemente sea Fei-Fei Li. En 2006, creó ImageNet, un conjunto de datos crucial para el auge actual de la IA. Ha trabajado en Google Cloud y ahora lidera el Instituto de IA Centrada en el Humano de Stanford. OpenAI, por su parte, ha definido cinco niveles de progreso hacia AGI, comenzando con chatbots, luego razonadores, agentes, innovadores y, finalmente, organizacionales.
Li ha estado fascinada por la inteligencia desde pequeña y ha estudiado IA desde antes de que fuera rentable. En 2012, su trabajo con ImageNet y AlexNet marcó el inicio de la IA moderna, impulsada por datos masivos y redes neuronales.
Sobre la reciente controversia de la ley de IA en California, SB 1047, Li se mostró cautelosa. Aunque ha expresado preocupaciones sobre esta ley, ahora está enfocada en el futuro. El gobernador Newsom la invitó a formar un grupo de trabajo para desarrollar regulaciones para la IA. Li enfatiza la importancia de no castigar a los tecnólogos, sugiriendo que debemos centrarnos en el impacto en las personas y las comunidades.
Li también está dirigiendo su startup, World Labs, en San Francisco, siendo una de las pocas mujeres al frente de un laboratorio de IA. Cree que una inteligencia humana diversa conducirá a una inteligencia artificial diversa, lo que resultará en mejor tecnología. En los próximos años, espera avanzar hacia la “inteligencia espacial”, que implica que las computadoras no solo vean, sino que entiendan el mundo en 3D. Esto es un desafío mucho más complejo que simplemente reconocer objetos.